En la proximidad de tu boca,
el deseo sin control se desborda,
cerca, tan cerca, que puedo escuchar
a tu corazón llamándome,
nombrándome, pidiendo que acorte
la distancia entre nuestros labios para
encontrarnos en un beso que nos
haga escapar de la realidad…
Tus ojos fueron mi destino…
Tus ojos fueron mi destino,
tu mirada se convirtió en mi hogar,
cada que me pierdo en tu mirar,
me es imposible no ponerme a soñar…