Miro el reloj,
te imagino pensando
en lo mismo que yo,
en estar pronto
contemplándonos en silencio,
diciéndonos con la mirada
esa ausencia cuanto dolió…
Repentino adiós…
Repentino adiós, el porqué,
la duda eterna me dejó,
no hubo explicación,
ni siquiera un atisbo
de qué ocurrió y porque
lo nuestro en un abrir
y cerrar de ojos murió…