Me dueles y no sé qué hacer,
ya no puedo tocar otro cuerpo
e ignorar que es no es tu piel,
y en el crepúsculo de ese encuentro
no dejo de pensar que no eres tú
ni te he de acariciar otra vez…
La pluma es mi voz…
Me dueles y no sé qué hacer,
ya no puedo tocar otro cuerpo
e ignorar que es no es tu piel,
y en el crepúsculo de ese encuentro
no dejo de pensar que no eres tú
ni te he de acariciar otra vez…
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