Quisiera percibir el aroma
de tu piel a través de viento,
levantar la vista y encontrarte
mirándome, sonriendo,
acercándote a mí con la intención
de fundirnos en un beso…
Me dejé arrastrar…
Una y otra vez la vida me golpeó sin titubear,
me estaba preparando para tu inmenso mar
que me acariciaba al caminar, y por tus olas,
hasta tus adentros me dejé arrastrar…