La lluvia cesó con tu llegada,
dejando de inundarme el alma rota,
diciéndome que el dolor
quedaría atrás y por fin, de nuevo,
podría volver a confiar
y a dejarme amar…
La pluma es mi voz…
La lluvia cesó con tu llegada,
dejando de inundarme el alma rota,
diciéndome que el dolor
quedaría atrás y por fin, de nuevo,
podría volver a confiar
y a dejarme amar…
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